De escritos pasados II.

Bueno...pues hace una año, mi profesora de Literatura dejo como tarea escribir una carata los muertos, yo inspiradísima en la novela de Stephanie Meyer, Crepúsculo le escribí a uno de los protagonistas, aquí la carta dedicada a Jacob Black.

México, D.F., 2 de noviembre de 2008.

Querido Jake:

Espero que al recibir mi carta estés un poco mejor que en este mundo, lleno de ideas vagabundas y de osada imaginación que hacían tan imperfecta tu vida. He tenido problemas al aceptar que fuiste sólo un medio para que los lectores de la novela de donde eras participe quedáramos atrapados en la historia, de verdad, te tomé gran cariño.

            Me gustaría decirte tantas cosas cara a cara, pero cómo sé que no es posible pues te las escribo aquí, en cortas líneas que en ocasiones pueden ser tan inexpresivas; simplemente, me encantaste desde que Stephanie Meyer puso tu nombre en ese primer libro, Crepúsculo, como una primera cita. Te creé así, tan niño, tan angelical, tan irresistible a primera vista. Que tonta debió ser Bella al dejarte ir.

            A veces me cuestiono sobre tu existencia, ¿es verdad que sólo vives en mis sueños?,o será que tengo a mi lado un “mejor amigo” en el que tú estás; esta carta debía ser dirigida a un muerto, pero tú no estuviste, ni estarás vivo, porque sólo vives cuando abro el libro y falleces cuando te dejo escapar de ese vago rincón de soledad que llenas en mi imaginación; y sin abundar en la retórica, ¿es entonces que estás muerto?

            De cualquier manera, te amo; cuál si hubieras vivido, cuál si estuvieses estado conmigo, no importa…lo recalco, te amo.

Donde quiera que te haya dejado, un gran beso y un abrazo dentro del corazón, que quede inmortalizado, que te quedé como un llano recuerdo de lo humano que pudiste llegar a ser.

Con cariño y por siempre tuya, Adarely.